viernes, 28 de enero de 2011

Solomillo de cerdo con manzana.

Como este plato soporta bastante bien ser recalentado, acostumbro a hacer dos solomillos para los que somos en casa; dos adultos y dos críos.
Salpimento los solomillos y los frío con poco aceite pero muy caliente para que se doren rápidamente por fuera sin que se cuezan mucho por dentro.  Los retiro y los pongo en una cazuela ovalada de PYREX con tapa. En la sartén en que he freído los solomillos frío dos cebollas cortadas en juliana. Cubro los solomillos con la cebolla frita. Frío dos manzanas cortadas en rodajas y las flameo con un vaso de brandy. Cubro con las manzanas la cebolla que a su vez cubre los solomillos. Vierto en la sartén un vaso de agua para desgrasarla y añado el agua a la cazuela con el solomillo, la cebolla y la manzana. Tapo la cazuela y al horno una hora a 120 grados. Una vez horneado, aparto el solomillo para cortarlo en rodajas mientras paso por la batidora el resto del contenido de la cazuela. Sirvo las rodajas de solomillo con la salsa por encima y unas patatas fritas cortadas a dados.
Una pequeña variante muy sabrosa pero poco saludable es añadir un poco de manteca de cerdo a la sarten cuando frío la cebolla.

viernes, 14 de enero de 2011

Huevos al plato, sin plato.

En realidad, se trata de unos champiñones rellenos,  pero entonces tiene menos gracia el nombre. sale una tapita bastante resultona sin demasiado esfuerzo.
Los ingredientes: champiñones grandes, jamón y huevos de codorniz.
Frío el jamón, lo retiro y en el mimo aceite frío los pedúnculos de los champiñones picaditos. Pico el jamón frito, mejor dicho, lo corto en trozos muy pequeñitos con unas tijeras. Pongo las copas de los champiñones en una rustidera y las relleno con la picada de jamón y champiñón mezclados. Un chorrito de aceite, y al horno a 190 girados 20 minutos. Ahora viene la parte más delicada, por lo menos para un manazas como yo, frío un huevo de codorniz para cada champiñón y emplato los champiñones cada uno con su picada y su huevo encima. Recomiendo comer cada champiñón de un bocado.

lunes, 10 de enero de 2011

Bacalao con olivada.

Una receta sencilla. Cuanto más sencilla es la receta, más importante es la calidad es los ingredientes. Yo utilizo filetes de bacalao  de unos cuatro dedos de ancho. En aceite de oliva virgen, frío el bacalao ligeramente enharinado, retiro el bacalao. Añado al aceite una cucharilla de café de olivada por cada trozo de bacalao para que se fría unos 10 o 15 segundos, lo justo para que pierda el exceso de amargor. Añado un poco de tomate rallado, como media cucharada sopera, y lo frío con olivada un minuto o incluso menos. Vierto el contenido de la sartén sobre el bacalao.